Garbanzos con espinacas y chorizo
Hace una semana que ha empezado el frío y ya se empiezan a cocinar potajes y cocidos en los hogares. Una receta que seguro habéis visto alguna vez en casa es el potaje de garbanzos, hoy os traemos una versión menos contundente pero no por ello menos buena.
El origen de esta receta en versión potaje se atribuye a los franceses que describían el potaje como un guiso compuesto de carnes, tubérculos y legumbres cocidas. En el potaje cabe casi cualquier ingrediente, por eso además de garbanzos nos encontremos con espinacas o acelgas, y carne o pescado dependiendo de la receta.
Si la podéis preparar el día antes estará incluso más buena aún que recién hecha. Aquí os dejo el potaje versión de mi madre:
Ingredientes
- 500 gr de garbanzos (cocidos o crudos)
- 4 dientes de ajo
- 2 cebollas grandes
- 1 hoja de laurel
- Sal y pimienta (al gusto)
- 4 cucharadas de aceite de Oliva extra virgen
- 2 tomates grandes
- 2 chorizos
- Agua
- 350 g espinacas limpias (o congeladas)
*Antes de empezar a cocinar (tomad nota tanto si utilizáis garbanzos cocidos como crudos)
Si utilizamos garbanzos secos los pondremos en remojo la noche anterior en agua templada junto con una cucharadita de bicarbonato o un puñado de sal. Una vez hayan pasado unas 10-12 horas, los lavamos para quitar cualquier impureza o garbanzo estropeado. Escurrimos y reservamos hasta el momento de prepar el plato.
Si váis a emplearlos ya cocidos lavadlos muy bien sin que quede ningún resto de la gelatina que rodea al garbanzo y añadidlos al final de la cocción del guiso, sólo para que se impregnen bien del sabor del resto de los ingredientes.
Preparación
- Cortamos la cebolla y picamos el ajo y sofreímos durante 10 minutos en aceite de oliva en una cacerola baja de aluminio fundido antiadherente.
- Añadimos el tomate y la hoja de laurel. Sofreímos también durante 2-3 minutos.
- Añadimos el chorizo y dejamos que suelte su aceite sofriendo durante unos 5-10 minutos.
- Cubrimos con agua fría (importante para que comience a hervir lentamente) hasta que quede la cacerola casi llena (sólo en el caso de los garbanzos crudos, si utilizamos garbanzos cocidos pondremos sólo un vasito de agua), recordad que tenemos que añadir más ingredientes.
- Cuando empiece a hervir bajamos el fuego para que vaya más lento y no rompa las legumbres. Añadimos los garbanzos (si son crudos los coceremos una media hora).
- En otra cazuela blanqueamos las espinacas para quitarles un poco el amargor. Para blanquear ponemos agua hirviendo con sal y metemos y sacamos la verdura para que sólo esté en el agua un par de segundos. Troceamos con un cuchillo grande las espinacas blanqueadas y las añadimos en los últimos 10-15 minutos de cocción de los garbanzos. Debe ser a fuego lento probando de vez en cuando por si no necesitasen más cocción.